Departamento de Ciencia Animal
Colorado State University
Fort Collins, Colorado 80523-1171
Publicado en Beef Magazine, enero de 2009
Traducción del Dr. Marcos Giménez-Zapiola
Es una maravilla ver que los ganaderos tienen cada vez más interés en el manejo de la hacienda sin estrés. El manejo calmo del ganado tiene muchos beneficios, que incluyen la mejora en la ganancia de peso y la mayor seguridad para los trabajadores.
El ganado se fija en los detalles, y cosas pequeñas que uno puede pasar por alto hacen que el buen manejo sea difícil y hasta imposible. He aquí unas pocas medidas simples para mejorar tanto las instalaciones como el manejo de la hacienda.
El ganado también puede negarse a avanzar si ve gente adelante, o vehículos en movimiento. Por esta razón muchas mangas funcionan mejor cuando tienen paredes ciegas. Si la manga tiene muchas puertas colgantes rebatibles, para que el ganado no pueda retroceder, el avance se puede retardar. En muchas instalaciones he podido mejorar el movimiento del ganado atando algunas de estas puertas para que queden siempre abiertas. Cuando esas puertas están justo en la entrada de la manga, conviene dotarlas de un mecanismo de control remoto, como una soga, para mantenerlas abiertas mientras entran los animales, de modo que no tengan que empujarlas cada uno de ellos para abrirlas.
Los reflejos de luz en pisos mojados o en metales también pueden ser un problema. Las superficies opacas son mejores para el movimiento de la hacienda. Lo recomendable es pintar las instalaciones de un color simple y uniforme.
A veces, los animales también se resisten a pasar de un piso de tierra a uno de cemento. Este problema se puede resolver echando un poco de tierra sobre el hormigón para reducir el contraste entre ambas superficies.
Para resolver este problema, se necesita que la luz natural llegue al interior del edificio. Esto se puede resolver retirando alguna parte de las paredes laterales, o instalando paneles de plástico transparentes en el techo o paredes, para permitir la entrada de mucha luz solar en los lugares sombreados.
El movimiento mejora si se eliminan las sombras. En un día luminoso, la luz artificial dentro de la construcción no proveerá suficiente claridad como para eliminar el efecto “agujero negro” porque la luz solar es mucho más fuerte que la artificial. A la noche, la iluminación eléctrica indirecta es muy efectiva para atraer al ganado de modo que entre a los edificios o camiones.
Cuando los animales se agitan, les lleva entre 20 y 30 minutos recuperar el ritmo cardíaco normal. Si el cepo o la manga tienen piso resbaladizo, el ganado suele agitarse cuando sus pezuñas tienen pequeños resbalones repetidos. Los resbalones tienden a ser el principal problema en los espacios pequeños de encierro, como las balanzas, mangas y toriles.
Un piso de hormigón alisado por el uso se puede convertir en antideslizante instalando una malla de neumáticos usados a modo de felpudo, o una rejilla hecha con barras de acero. Si se usan las barras de acero, se las debe cortar y soldar de modo que la grilla quede apoyada completamente plana sobre el piso. No hay que soldar las barras cruzadas unas sobre otras, porque se forman rendijas y los animales se pueden lastimar las pezuñas cuando quedan atrapadas entre la barra y el piso.
El corral de encierre, embudo o toril que precede a la manga no debería cargarse antes de que haya lugar en la manga para permitir que algunos animales entren inmediatamente en ella. El “corral de encierre” debería rebautizarse como “corral de paso”. El ganado entrará más fácilmente a la manga si no ha sido retenida en el corral porque la manga está llena. Si los animales son retenidos mucho tiempo en el corral de encierre, se puede hacer más difícil hacerlos entrar a la manga debido a que se han dado vuelta durante la espera.
Todos los corrales de encierre, independientemente de su diseño, deben llenarse sólo hasta la mitad. Uno de los errores más comunes en el manejo del ganado es llenarlos completamente. La gente a veces hace esto para caminar menos, pero el buen manejo de la hacienda requiere caminar más.
Para prevenir esto, el manejo debería medirse con números. La medición hace posible determinar si las prácticas están mejorando o empeorando. Para medir el manejo, hay que anotar el número de animales que sufren las siguientes fallas de manejo, y determinar los porcentajes:
Si se está haciendo un buen trabajo en el manejo de bajo estrés, el porcentaje de animales que sufren alguno de estos problemas es muy bajo. La guía de la National Cattlemen’s Beef Association establece que las prácticas de manejo necesitan ser revisadas si más del 2% de los animales se cae o se mueve más del 10% usando la picana eléctrica. Numerosos ganaderos y corrales de engorde están trabajando mucho mejor que eso.
Videos disponibles en la web sobre manejo del ganado: